Mi historia personal

Nunca pude concebir la terapia psicológica como algo meramente cognitivo y racional. Puede que la psicología sea el estudio de la psique, pero el tratamiento de la salud mental de una persona va mucho más allá de la mente.

Con 20 años tuve mi primera toma de contacto con mi conciencia. Al menos la primera que impactó mi forma de percibir el mundo y relacionarme con él. Fue viviendo en Colombia, tras una experiencia enormemente reveladora a la que le dedicaré un espacio personalizado en este blog sin duda en algún momento. Este día sentí mi primer "engaño". Mi primera venda caída como digo yo. Difícil de explicar cómo de la noche a la mañana pasas a ver el mundo con otros ojos... solo podía pensar mientras conducía por el desierto de la Tatacoa "¿cómo pude no darme cuenta todo este tiempo?".

Lo que sucedió aquel día es lo que muchos llaman "el despertar". Esto no es nada espiritual ni sectario, como la ignorancia dice. Esto es un proceso necesario para retomar las riendas de tu vida y tu persona. Es un clic en todos los aspectos (físico, mental, emocional, espiritual, de hábitos diarios...) que activa y alimenta lo que se llama la fuerza vital del ser humano.

Después de este momento todos mis planes de vida cambiaron, pasé de querer opositar para trabajar como psicóloga penitenciaria a donar prácticamente toda mi ropa y recorrer el mundo con una mochila. Lo que mucha gente cree es que aquellos que toman un vuelo sin billete de vuelta quieren conocer el mundo. Pero si algo he descubierto en todos estos años, es que lo que el ser humano persigue realmente al vivir un momento de tal incomodidad y miedo -como es el de abandonar el nido sin saber absolutamente nada de hacia dónde se dirige- es reencontrarse consigo mismo.

Tras vivir este proceso, de reencuentro con una misma lejos de todo lo que alguna vez me definió, en mis propias carnes entendí que habían muchos factores que no encontraba en la psicología occidental y eran piezas clave para un proceso de sanación y reconstrucción del ser. Es así como comencé a ampliar mis recursos terapéuticos viviendo y aprendiendo de distintas culturas y enfoques terapéuticos de sanación emocional. Es cuando entendí que no hay separación. Que si cuerpo, mente y espíritu no trabajan juntos entonces no se está regando la planta completa.

Los 3 pilares: La mente, el Sistema Nervioso y el cuerpo emocional

En Tailandia me encontré con algo que llevaba muchos años buscando conocer: El Reiki. Esta herramienta (que se convierte en una forma de interaccionar con el mundo y experimentar la vida) es una práctica de medicina alternativa que se basa en la localización, lectura y transformación de energía bloqueada. Es una filosofía, práctica y terapia alternativa que tiene como objetivo la canalización de energía vital para la armonización de mente, cuerpo y espíritu con el fin de obtener salud y equilibrio.

La definición de la psicología es variada y amplia. Se la define como una disciplina que tiene como objetivo analizar los procesos mentales y del comportamiento de los seres humanos y sus interacciones con el ambiente físico y social. Otra definición que podemos encontrar sobre esta disciplina es aquella que estudia y analiza la mente humana para solucionar patologías emocionales, mentales, sociales o problemas de aprendizaje. Pero la que más me llama la atención personalmente es la siguiente: Parte de la filosofía que trata del alma, sus facultades y operaciones.

Para esta definición no hablamos de nada místico o universal. Hablamos de la conciencia. Aquella que se va despertando y desarrollando a la misma vez que nuestro cuerpo físico: mediante el paso de los años con todas sus experiencias, traumas y emociones derivadas de éstos. Pero si hay consciente, también hay subconsciente. No existe yin sin yang. El subconsciente ha sido algo muy estudiado y reflejado en la filosofía, principalmente. Hoy en día también lo podemos llamar Sistema Nervioso. Es aquel que guarda todas nuestras perturbaciones a lo largo de nuestra vida bajo llave para que nosotros podamos seguir cumpliendo con aquello en lo que se ha convertido la "vida" en nuestra sociedad. Un videojuego donde pierde el primero que pare y reconecte consigo mismo. No te vayas a perder todo lo que sucede a tu alrededor. No vayas a dejar de estudiar o trabajar. No vayas a dejar de cumplir con todas las personas a tu alrededor.

Pero cada vez más, podemos ver a nuestro alrededor cómo esta evolución ha pasado mucha factura. La sorpresa ya no es estar enfermo o desarrollar patologías que nos desestabilicen emocional y mentalmente. Lo raro ahora es estar completamente sano. Y más raro aún es que alguien identifique y entienda por sí mismo/a por qué su cuerpo reacciona así. Porque, ¿para qué identificar la raíz del problema? si se puede acallar esa reacción como quien amordaza a un rehén con un par de pastillas.

El subconsciente dirige toda la orquesta y es por eso que los problemas mentales y físicos nunca terminan de irse y los acarreamos como un ancla el resto de nuestra vida. Por lo tanto, ante un subconsciente que ha sido rechazado y olvidado durante tantísimos años, la psicología aislada de forma cognitiva se queda corta para lograr una sanación interna. Si la psicología actúa sobre el consciente y la medicina sobre el cuerpo. ¿Dónde queda el subconsciente? Es aquí donde entra la terapia energética del Reiki.